Hoy tenemos Pleno Ordinario, a las 8 de la tarde, horario de invierno. Un pleno absolutamente descafeinado, a saber:
- Actas
- Decretos de Alcaldía
- Ruegos y Preguntas
Hace casi dos meses de la ultima sesión, y todo lo que tenemos de temas de interés es esta escueta relación. Para más vergüenza, la convocatoria es del día 26 de Octubre, con la única intención de evitar que el Grupo Municipal del Partido Popular presente iniciativas de trámite ordinario, como viene haciendo en todos los Plenos, iniciativas muchas veces comentadas en este foro, que solo pretenden mejorar la vida diaria de los vecinos de Caslarreina, y que sistemáticamente se han negado a tratar en ningún pleno, saltándose a la torera la legislación vigente y los derechos que como concejales nos asisten.
Pero de una u otra manera, vamos a seguir proponiendo todas aquellas cuestiones que vengan a favorecer el bienestar de nuestro vecinos.
Hoy lo haremos una vez más, presentamos una Moción Urgente para el Pleno de hoy que rebaje el tipo impositivo del IBI (la contribución urbana) de forma urgente para que sea de aplicación en el ejercicio 2009, esto es, que el recibo del año que viene se acomode a una cifra lógica y no abusiva.
Es necesario que la rebaja sea aprobada de forma urgentísima, para que de tiempo a cumplir el trámite administrativo antes del 1 de Enero, y que así se pueda aplicar el año próximo.
De lo que ocurra en el Pleno, daremos cumplida cuenta.
1 comentario:
Buenos días estimados contertulios.
Esperamos a que don David nos ilustre sobre el fondo y los detalles del pleno municipal celebrado ayer, mientras tanto y sobre todo expectantes por el papel que desarrolle nuestro presidente Rodríguez en la cumbre del G20+X, vamos a preocuparnos de cuestiones de alta política, de filosofía de la cosa pública, tal y como gusta hacer a nuestro peculiar alcalde.
Es notoria su afición a cortar y pegar, como hacen los malos estudiantes que caen en las celadas tendidas en las páginas publicadas en Internet como por ejemplo “El rincón del vago”. Su oráculo personal e intelectual, su Biblia incontestable e infalible, son los medios audiovisuales del grupo Prisa. Nadie puede negar que “El País” o la cadena “Ser” son unos de los referentes más importantes del periodismo en España. En ambos trabajan y colaboran plumas de reconocido prestigio y de solvencia intelectual fuera de toda duda, pero de ahí a considerar al grupo Prisa como fuente de pensamiento único va un abismo. Eso es lo que le acontece a nuestro alcalde, incapaz de tener un discurso propio, plagia el ajeno, desprestigiando de esta manera a ambos medios.
En “El País” todos los españoles vivimos momentos de emocionantes de libertad, seguíamos y seguimos con interés sus artículos y la impronta de José Luís Cebrián permanecerá en el acervo democrático de esta nación. Lo mismo se puede decir de Iñaki Gabilondo, quien durante la crisis provocada por el 23F mantuvo a España en la ilusión y la convicción democrática frente a los cavernícolas sublevados contra la Constitución y frente al pueblo español, en el que reside la Soberanía Nacional, no en los políticos, ni en los medios de comunicación.
Don Félix, amigo de la memoria, dice que por “ de formación” al igual que el diestro don Jesulín, no explora en el pasado de quienes conforman lo que sólo a él le parece el pensamiento único, haciendo flaco favor a unos medios de mucho más calado intelectual. El pasado de Cebrián en el aparato informativo franquista, la militancia falangista del difunto Polanco al mando de la centuria “García Morato”, el monopolio de la editorial “Santillana” sobre los libros de texto oficiales en la dictadura o sus relaciones filiales y económicas con el empresario modelo del desarrolismo franquista don Eduardo Barreiros, no empañan, para nada, el valor de ambos y su contribución innegable al desarrollo democrático español. En cambio a don Félix sólo le preocupa bucear en los desgraciados años 30 del siglo pasado, buscando estigmatizar a nietos y biznietos de aquellos que combatieron en una guerra civil, en la que en ambos bandos se produjeron salvajadas. Es curioso ver como uno de los protagonistas directos de aquel drama nacional, don Santiago Carrillo, se muestra mucho más lúcido que el juez don Baltasar Garzón.
Ilustraba el señor Caperos su blog con una nueva edición del copiar y pegar, quizás por su incapacidad para desarrollar un discurso intelectual personal, crítico y con sentido común racional. En el mismo aparece la aportación moral, que no ética, de un catedrático de esos que frecuenta poco las cátedras y nada las aulas. El formato un decálogo, a la maniera del que el dios de los judíos dio al hebreo Moisés. Es curioso como quienes militan en un partido de raíces marxistas recurren, con obcecación inexplicable, a modelos de la religión del libro judeo-cristiana. Son los ateos de la nueva religión, que copian del cristianismo sus mismos esquemas y discursos. No es algo nuevo, ya lo hizo Robespierre cuando sustituyó a Jehová por la diosa razón y a las iglesias cristianas por tempos de la Razón.
En un estado democrático la religión, la moral particular, deben estar fuera del espacio público. En una sociedad plural, donde coexisten sensibilidades morales diferentes, credos religiosos variados, no es de recibo que el Estado cree su propia moral o que los representantes democráticos participen, como tales y no a título personal, en manifestaciones públicas de culto. Acudir a una procesión católica es menospreciar al resto de cultos y sensibilidades, es decir a ciudadanos. El pretender imponer desde la aulas, por ley, una moral de un partido es igual de ilegítimo. El permitir que en las escuelas públicas o concertadas se impartan asignaturas de una moral religiosa o partidista, es antidemocrático y excluyente.
En España es necesaria, imprescindible, una educación ciudadana para nacionales e inmigrantes, sean estos últimos temporales o con horizonte permanente. Pero debe estar enfocada hacia los valores que conforman nuestra forma de convivencia, que no son otros que los contenidos en el vigente ordenamiento constitucional o los emanados de las instituciones supranacional como la UE y la ONU.
Queda en el tintero una aportación personal sobre la buena praxis de los servidores públicos o quienes aspiran a ello.
¡Viva España!
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